Para llevar una vida sexual sana y responsable es importante conocer los anticonceptivos a los que tenemos acceso y saber elegir el más apropiado para la situación o con el que te sientas más cómoda. Según la Encuesta Nacional en Demografía y Salud realizada en 2015, en Colombia El 19.1 % de las mujeres actualmente unidas y el 17.5 % de las no unidas sexualmente activas no usan métodos anticonceptivos. Por eso en ALÓ DOCTOR, te presentamos los diferentes tipos de métodos anticonceptivos que existen, para que estés mejor informada:
Métodos hormonales:
La píldora: Interfiere la ovulación por medio de diversas combinaciones de estrógenos y progestinas sintéticas. Se suministra una pastilla de manera diaria. Puede tener efectos secundarios.
Píldora POP, de sólo progestina: También se toma una pastilla diaria, ojalá a la misma hora del día. Además de interferir la ovulación, engrosan el moco cervical, dificultando la fecundación.
Parche anticonceptivo: Es un adhesivo de plástico fino que al ponerse en la piel, libera hormonas hacia el torrente sanguíneo. Cada 7 días se debe poner uno nuevo por 3 semanas y descansar la 4.
Píldora del día después: Es una píldora anticonceptiva de emergencia con alta carga hormonal. Por lo general se toma una o dos dosis antes de las 72 de haber tenido una relación sexual sin protección.
Anillo vaginal: Se inserta en la vagina donde libera progestina y estrógenos sintético durante 3 semanas. El anillo es pequeño y flexible.
Inyección: Es un anticonceptivo inyectable que suministra progestina y Depo-Provera®. Se aplica cada tres meses, sin embargo, tiene efectos secundarios.
Implante anticonceptivo: Una pequeña varilla de plástico se inserta de manera subcutánea liberando hormonas durante tres años. Es altamente efectivo.
Métodos de barrera:
Preservativo masculino: Es el mejor método para prevenir embarazos y enfermedades sexuales. Es una funda de látex que se pone en el órgano reproductor masculino.
Preservativo femenino: Es una especie de bolsa hecha con caucho de nitrilo que se inserta en la vagina. Es menos efectivo que su versión masculina.
Espermicida: Impide que los espermatozoides lleguen al útero destruyendolos de manera química. Tiene diferentes presentaciones como espuma, gel, crema o supositorio. Se recomienda utilizarlo junto a otro método anticonceptivo.
Diafragma: Es una copa flexible hecha de látex que se coloca en la vagina e impide que la esperma ingrese al útero. Debe usarse durante 6 a 8 horas después de la relación sexual.
Esponjas anticonceptivas: Es una espuma desechable con espermicida. Se inserta en la vagina e impide que la esperma ingrese al útero, además elimina los espermatozoides. Se debe retirar después de mínimo 6 horas.
Métodos intrauterinos:
DIU hormonal: Pequeño dispositivo en forma de T que se inserta en el útero, libera progestina haciendo que se engrose el moco cervical evitando la fecundación. Se usa durante máximo 5 años.
DIU de cobre: También se inserta en el útero pero es el cobre el que impide la fecundación a través de una reacción inflamatoria. No es un método muy recomendable.
Métodos permanentes:
Ligadura de trompas: Se puede realizar a través de intervención quirúrgica o endoscópica. Allí se sellan, cortan o atan las trompas de falopio obstruyendo el conducto entre los ovarios y el útero.
Vasectomía: Por medio de una cirugía se corta y obstruye el conducto que lleva los espermatozoides del testículo a la uretra impidiendo que salgan de los primeros y que lleguen a los óvulos.
Implante esterilizador: Se inserta un fino tubo a través de la vagina para colocar un dispositivo en cada trompa de falopio, luego de formarse tejido cicatricial se impide que la esperma llegue a los óvulos.
Ahora que conoces todos estos anticonceptivos, elige el de tu preferencia e inicia el proceso de planificación familiar, ya sea con tu EPS, con un médico de confianza o por tu cuenta.