En general, el cáncer de cuello uterino es un carcinoma epidermoide causado por la infección con el papilomavirus humano; menos frecuente es el adenocarcinoma.
El cérvix o cuello uterino es la parte inferior del útero que forma el canal que lleva a la vagina. La mucosa que recubre el cérvix está en continuidad con la vagina y se denomina ectocérvix, mientras que la que recubre el conducto o canal cervical que lleva hasta la cavidad del cuello uterino, se denomina endocérvix.
En este tipo de cáncer, la mayor parte de los tumores surgen en la zona donde se une el ectocérvix con el endocérvix dando lugar a carcinomas de células escamosas.
Estos dos tipos de células se encuentran en un lugar llamado zona de transformación. La ubicación exacta de la zona de transformación cambia a medida que la mujer envejece. La mayoría de los cánceres de cuello uterino se origina en las células de la zona de transformación. Estas células no se tornan en cáncer de repente, sino que las células normales del cuello uterino primero se transforman gradualmente con cambios precancerosos que se convierten en cáncer.
Sólo algunas de las mujeres con pre-cánceres de cuello uterino padecerán cáncer. Por lo general toma varios años para que un pre-cáncer de cuello uterino cambie a cáncer de cuello uterino, aunque esto también puede ocurrir en menos de un año, en la mayoría de las mujeres, las células precancerosas desaparecerán sin tratamiento alguno. Aun así, en algunas mujeres los pre-cánceres se convierten en cánceres verdaderos (invasivos). El cáncer se produce cuando las células normales del cuello del útero empiezan a transformarse y crecen de manera descontrolada.
En Colombia, el cáncer de cuello uterino es la primera causa de muerte por cáncer entre mujeres de 30 a 59 años. A diferencia de otros cánceres, éste cuenta con un agente causal en la mayoría de los casos: el virus del papiloma humano (VPH). Se encuentran dos tipos de VPH (16 y 18) que son los causantes del 70% de los cánceres de cuello uterino y de las lesiones precancerosas del cuello del útero, aunque el tipo de virus que genera el mayor riesgo a desarrollar cáncer in situ o cáncer invasor es el VPH 16.
La mortalidad por cáncer de cuello uterino está asociada a condiciones socioeconómicas desfavorables, encontrándose un mayor riesgo de mortalidad en regiones rurales dispersas, con bajo acceso a los servicios de salud y en grupos de menor nivel educativo.
Infección por el VPH
Fumar
Dieta inadecuada
Defensas bajas
Inicio temprano de relaciones sexuales o muchas parejas sexuales. Cuantas más parejas sexuales tengas mayor será las probabilidad de adquirir el virus del papiloma humano
Múltiples gestaciones
● De los 25 - 30 años: Citología de cuello uterino bajo el esquema 1-1-3 (una citología cada año durante dos años consecutivos y si el resultado de las dos es negativo se hace cada 3 años.
● De los 30 - 65 años: citología combinada con las pruebas de detección del Virus de Papiloma Humano (ADN/VPH).
● Mujeres entre 25 - 50 años residentes en zonas de difícil acceso a servicios de salud: técnicas de inspección visual del cuello uterino.
Los cánceres de cuello uterino y los pre-cánceres se clasifican según el aspecto que presentan al observarlos con un microscopio. Los dos tipos más comunes de cánceres de cuello uterino son el carcinoma de células escamosas y el adenocarcinoma.
9 de 10 casos de los cánceres de cuello uterino son carcinomas de células escamosas. Estos cánceres se originan de células en el exocérvix y las células cancerosas tienen características de las células escamosas cuando se observan con un microscopio. Los carcinomas de células escamosas se originan con mayor frecuencia en la zona de transformación donde el exocérvix se une al endocérvix.
Otros cánceres cervicales son adenocarcinomas, los adenocarcinomas son cánceres que se originan de células glandulares. El adenocarcinoma cervical se origina en las células de las glándulas productoras de mucosidad del endocérvix. En los últimos 20 a 30 años, se ha notado que los adenocarcinomas cervicales parecen ser cada vez más comunes.
Con menor frecuencia, el cáncer de cuello uterino tiene características tanto de los carcinomas de células escamosas como de los adenocarcinomas. Estos tumores se llaman carcinomas adenoescamosos o carcinomas mixtos.
Aunque casi todos los cánceres de cuello uterino son carcinomas de células escamosas o adenocarcinomas, otros tipos de cáncer también se pueden desarrollar en el cuello uterino. Estos otros tipos, tal como melanoma, sarcoma y linfoma, ocurren con más frecuencia en otras partes del cuerpo.
A veces estos y otros signos y síntomas se deben al cáncer de cuello uterino o por otras afecciones. Consulta con tu médico de confianza si presentas algunos de los siguientes:
Sangrado vaginal fuerte o leve entre las menstruaciones o después de la misma. (incluido el sangrado después de una relación sexual).
Flujo vaginal inusual.
Dolor pélvico.
Tener un sangrado menstrual más largo y abundante de lo normal.
Dolor durante las relaciones sexuales.
Aumento de la secreción vaginal.